Entrevista a José Manuel Gómez y Méndez en Diario de Huelva
José Luis Camacho Malo entrevista a José Manuel Gómez y Méndez, socio de la APC nacido en la mitad del siglo XX, licenciado y Doctor en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense. Estudió Magisterio y se postgraduó en Altos Estudios Internacionales y en Sociología Política a través del Centro de Estudios Constitucionales, diplomándose en Sistemas de Documentación Científica por la Universidad Politécnica de Madrid.
Trabajó durante años en distintos Medios de Comunicación Social en Madrid y en Huelva, pasando a ejercer en la Universidad de Sevilla como profesor titular de la misma, desempeñando los cometidos de decano de la Facultad de Ciencias de la Información (1992-1995) y de director del departamento de Periodismo II (2003-2004). Ha sido director de 21 tesis doctorales; entre ellas las de Ramón Reig García, Pastora Moreno Espinosa, Antonio López Hidalgo, José Álvarez Marcos, Antonio Ramos Espejo, Jaime del Hoyo Pérez, Ricardo Ríos Pérez, Hada M. Sánchez Gonzales, Mariam Alonso González, Sandra Méndez Muros, Francisco Gallardo Uribe, Santiago Sánchez Traver, Noelia García Estévez y Rafa Vega Jiménez. Al inicio de 1996 tomó posesión como miembro de la Academia Norteamericana de la Lengua Española. En 1999 confundó la Academia del Periodismo con sede en Sevilla, asumiendo la dirección de su junta gestora.
Promovió, empujó, dinamizó grupos, entidades, colectivos, tanto desde el último rincón como desde puestos directivos, sin apostar por proezas personales ni corporativistas. Entre otros cometidos, en el siglo XX: en la década de los sesenta, sus acciones en el onubense grupo literario “Atalaya”; en los setenta, en la madrileña “Casa Regional de Sevilla, Cádiz y Huelva”, siendo cofundador del “Instituto Cultural Andaluz” en Madrid y de los “Amigos de Miguel Hernández”; en los ochenta, creación de la “Tertulia Cultural Onubense” y de la Federación de Asociaciones de la Prensa de Andalucía (inicialmente denominada coordinadora), así como el renacimiento de la Asociación de la Prensa de Huelva; en los noventa, su integración en el colectivo cultural “Gallo de Vidrio” de Sevilla y en la “Agrupación de Periodistas” de UGT-Andalucía. Ya en la primera década del siglo XXI, en los nacimientos y desarrollos asociativos de “Nueva Alameda” (en Sevilla) y “Est libri” (en Huelva). Fue nombrado primer comisionado (2005-2006) del centenario, en 2009, de la Asociación de la Prensa de Sevilla.
Ha publicado treinta libros entre obra propia, antologías y ediciones diversas, aparte de capítulos para distintos volúmenes, prólogos y estar en diversas antologías; destacan sus tres recopilaciones personales: sobre su poesía -“Veinte años” y “Treinta años”- y su prosa -“Aquí”-, aparte de diversos títulos sobre temática científica de su especialización como es la tecnología periodística, donde se encuadra la obra cibernética “Gutenberg.es”. Ha dirigido la enciclopedia “Huelva XX: Noticias de un siglo”.
Vivió en distintas ciudades y desde el inicio de la década de los noventa del pasado siglo, habita en Sevilla, donde desarrolla su labor docente-universitaria e investigadora-periodística, dirigiendo, en estas parcelas, el programa de postgrado sobre “Periodismo Local, Medio Ambiente y Sociedad Civil” y el equipo de investigación de Análisis y Técnica de la Información de la Universidad sevillana.
Cree en el ser humano por encima de todo como dimensión de plenitud de una sociedad en pluralidad…, donde quepan todos por encima de colores, ideas y creencias, donde no existan desajustes de hábitat por diferencias económicas. Donde cada mañana ilumine el sol para todos y no para unos pocos…; sabe que a veces puede suponer una utopía, pero sigue creyendo y disfruta haciendo cuanto hace, tanto desde su tiempo personal –sobre todo en plano cultural- como laboral, siempre en un sendero que lleve a ese fin pues considera que esa es la autenticidad de lo que para unos es solidaridad progresista y para otros caridad creencial.
Persona muy inquieta, a la hora de crear situaciones y actividades, pues aparte de las citadas anteriormente, también fue uno de los promotores de la Asociación de periodistas y aficionados taurinos de Huelva, y dirigió cortos cinematográficos con actores amateur. Ahora le gustaría hacer un recopilatorio de situaciones y anécdotas del nacimiento del Huelva Información en la calle Marina y posteriormente en Plaza San Pedro, y para ello se ha puesto en contacto con los que formaron parte de aquel proyecto pidiendo que escriban de ello.
P. – ¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?
R. – Un tiempo distinto en el vivir de cada día, aunque parezca que estamos en una etapa de plenitud distinta. No es más que una realidad entre Sanidad y Economía. La sociedad atraviesa una epidemia como en otros momentos de su transcurrir y ello repercute en el movimiento económico y por consiguiente se produce un desequilibrio en el vivir entre productividad, consumo y beneficio. La tangibilidad pandémica no es nada nuevo en el día a día; ahí está la remembranza, que se celebra cada inicio de septiembre, en Alájar cuando en 1833 el municipio pidió protección a la Virgen de los Ángeles ante el cólera y en el municipio no se produjo ningún contagio cuando en todas las localidades serranas del entorno, y en otras zonas geográficas, se produjeron numerosos fallecimientos.
P. – ¿Crees que durará mucho esta pesadilla de pandemia?
R. – Si mantenemos una convivencia desde el respeto a la normativa sanitaria, todo tendrá sus horas y evolución. No olvidemos que la ciudadanía ha de vivir en una pluralidad donde quepamos todos; no yo sí y tú no o aquél o el otro; todos, en plena armonía y con respeto mutuo; por tanto, si, en ese latir humano, somos conscientes del respeto sanitario, esto tendrá su dinámica y temporalización.
P. – ¿Cómo crees que cambiará la vida después de la pandemia, sobre todo, en el mundo del periodismo?
R. – El Periodismo debemos escribirlo con mayúscula como la Historia, la Literatura, la Medicina, la Industria… Y ante ello, desde el siglo XVII en que toma forma la dinámica del periódico, evolucionó y supo aceptar los tiempos con la tecnología que llegó al vivir de la sociedad como fue cuando arribó la Radio y la Televisión en el siglo XX. Y ya con el XXI, asumió la Cibernética. Y en ello estamos. Contar cosas, que sería informar a un receptor sobre acontecimientos en donde no estuvo, tiene una quehacer profesional de alta hondura, por encima del soporte, sea papel impreso, ondas radiofónicas, imágenes televisivas y canales cibernéticos. Y se informaba antes del “bichito” del Covid, durante el desarrollo del mismo y se seguirá haciéndolo tras el mismo. El Periodismo está ahí y seguirá estando como tal con sus profesionales y soportes de transmisión; otra cosa será el contenido productivo, pues el Periodismo privado está basado en la Publicidad y en tiempos de alteraciones del mercado, como son los desequilibrios por alteraciones colectivas de enfermedades, se producen desajustes empresariales en el día a día de la elaboración comunicativa; otra canalización sería en el Periodismo público que no tiene como fin la productividad empresarial. Ahí están estudios cualificados que señalan el descenso publicitario en tono al 20% en el 2020 ante el año anterior.
P. – ¿Has pasado miedo en algún momento?
R. – Si te refieres en cuanto a miedo ante el Covid, no. Asumí la realidad y procuré mantener un entorno saludable, aceptando que para unos, como los creyentes, todo se ponía en manos de la Trinidad o de otra asunción creencial, y para otros, pues todo se colocaba en la energía cosmogónica…
P. – ¿Qué papel crees está jugando la prensa y redes sociales en esta pandemia?
R. – Ha servido, a través de sus distintos soportes, para informar como se debería actuar sanitariamente. Ha prestado todo un servicio ciudadano.
P- ¿Cómo valoras la labor de los políticos en general en este último año y medio?
R. – Ellos han procurado realizar sus cometidos estén en el espacio que se encuentren, a gusto de quienes le votaron y en disgusto de quienes no lo hicieron. No olvidemos que, en el transcurrir social, el ciudadano siempre verá todo según el color del cristal ideológico con el que mire su día a día, teniendo sus pronunciamientos en equilibrio con su pensar y en el pensamiento está la ideología que hace que veamos a los políticos de acuerdo con el voto personal. Y aquél que no vota, que es abstencionista, pues nada querrá con los políticos.
P. – ¿Qué proyectos tienes para el futuro y que haces ahora?
R. – Uffffffffff. Proyectos siempre, mientras la mente esté en armonía y las neuronas transmitan al resto del cuerpo. No he dejado de investigar, de producir creación. Próximamente saldrán nuevos libros y seguiré mientras haya energía vital.
P. – ¿Qué necesita Huelva para despegar de una vez?
R. – Huelva está desde siempre ahí. Lo que para unos es despegar para otros es emprendimiento y beneficio. Esa palabra de despegar la escuché desde los años sesenta del pasado siglo con el que entonces se llamó Polo de Desarrollo. Considero que Huelva siempre ha ido evolucionando, aunque no a gusto de todos. Necesita mantener un ritmo y gestión para nuevas ideas que mantengan su transcurrir evolutivo en los años.
P. – ¿Qué significa para ti Huelva y Moguer?
R. – Moguer, la localidad donde nací. Huelva ciudad es el espacio donde me formé de muchacho, donde desarrollé mis iniciales pasos creativos, donde ejercí periodísticamente, con dimensionalidad provincial en el latir diario. Horas de un vivir terrenal.
P. – ¿Qué recuerdos guardas de tu etapa profesional en Huelva?
R- Las vivencias se acumulan si uno mira hacia atrás o indaga en la mente… Por un lado, la etapa literaria: desde el transcurrir de “Atalaya”, comenzado en el viejo instituto “Rábida”, de existencia uniprovincial, hasta la “Tertulia Cultural Onubense” en el Casino Comercial, pasando por la edición de “El Cuento Literario en Huelva”, que para 2022 hará el cincuentenario de haberse publicado con cubierta de Pepe Caballero, ilustraciones de José María Franco y de Francisco Manuel Rodríguez, y narraciones de Odón Betanzos, Juan Cegarra, Hermenegildo de la Corte, José Alejandro de la Corte, Petra Crespo, Manuel Chaparro Wert, A. Díaz Muñoz, Joaquín Domínguez, Ernesto Feria, Francisco Garfias, Rafael Leblic, Rafael López Ortega, Domingo Manfredi, Rodolfo Meneses, Manuel Mora Bayo, Carlos Muñiz-Romero, Ángel Neyra, Alberto Luis Pérez, Amalio Rivera del Castillo, Miguel Ángel Rubira, Pragmacio Salgado, José María Segovia, José María Vaz de Soto, Alfonso Villagómez y yo mismo. Por otro, el quehacer periodístico: desde las iniciales aportaciones a “Odiel” hasta los años en “Huelva Información”, sin dejar atrás colaboraciones radiofónicas…; horas compartidas con numerosas personas; no se me olvidará los domingos, en la noche, con lo que podríamos llamar “discursos” del Pepe Romax sobre la jornada deportiva cuando toda la redacción estaba imbuida en cerrar la edición para los talleres, los cuales eran plenamente lógicos y acertados, sin embargo el tiempo no estaba para oírle sino para concluir el trabajo periodístico y no es que currase, por mi parte, en el quehacer deportivo, sino en otro cometido del periódico y al estar la redacción en espacio abierto, todo se vivía/disfrutaba…; epidermizadas tengo las dinámicas en plenas fechas carnavaleras, rocieras, cinéfilas con el Festival, navideñas con los concursos de belenes y villancicos; tiempo compartido con los Bonys, padre e hijo, y con Patri en idas y venidas a los pueblos para cometidos periodísticos… Vivir incrustado que está siempre en cada partícula humana. Me gustaría recordar las horas comunicativas serranas junto a Aurelio de Vega. Y las siempre valiosas aportaciones informativas de los corresponsales como Paco Sánchez Borrallo, Antonio Mateos Lagares, Antonio Gómez Espina, Juan Bautista Cartes, Pepe Zamorano, Joaquín Real, Sebastián Forero padre. Y podría seguir detallando otros pormenores…
P. – ¿Cuál es la información que más recuerdas haber ofrecido y la que te gustaría dar?
R. – No tengo nada preferente informado ni para dar. En la vida del Periodismo, todo es un placer para informar si se vive desde el ejercicio informativo. Cada día es un contenido nuevo y de profundo valor comunicativo; lo que para mi podría ser de valoración para el receptor quizás no tendría importancia ya que todo está supeditado a la escala de valores de la receptividad por mucho que el emisor jerarquice el contenido.
P. – ¿Qué destacas de la forma de hacer Periodismo actualmente y si echas algo de menos de tus inicios?
R. – El Periodismo comenzó en los años setenta, en el extranjero, y en los setenta, en España, a tener las transformaciones tecnológicas que producía la Cibernética. Y tras más de 50 años, el ritmo informático ha producido una acción periodística más rápida en la transmisión del mensaje. Ahí está todo contenido en línea o en red que no solo afecta al surgimiento de Medios cibernéticos o a lo que hasta ahora fue papel impreso o ámbitos radiofónico o televisivo. No soy de quienes añoran el ayer y desea mantenerlo; aprendí que somos evolutivos y asumí que cada instante tiene su presente y mañana será lo que llegue con sus pormenores, dejando atrás lo que se convierte en pasado; por tanto me siento feliz en cada momento, aceptando siempre el vivir y su realidad; muchos encuentran su razón en las creencias, como en la cristiana con ese decir de “lo que Dios quiera” o en otras como “lo que Alá mande” o “lo que Buda nos ofrezca” o…
P. – Hay quien dice que el Periodismo será otro hacer o morirá.
R. – El Periodismo siempre será Periodismo. Habrá emisor, transmisor y receptor en el mensaje sea cual sea el soporte en papel, radio o televisión y ahora con la Cibernética. Y no estoy diciendo que toda persona puede hacer Periodismo por contar por Redes Sociales; eso sería comunicar. El Periodismo mantendrá la necesidad de tener sus elaboradores de contenidos, lo cual es todo un ejercicio profesional. Contar por contar no fue ni será Periodismo.
P. – ¿Cómo fue tu niñez y qué soñabas ser de mayor?
R. – La infancia y juventud, fue vivida sin altibajos. Cuando recuerdo es bonito, ya que lo de sinsabores, suelo dejarlo “aparcado”. De mayor, me he sentido haciendo lo que me gustaba: periodista y profesor.
P. – ¿Quiénes son o han sido tus referentes en la vida personal y profesionalmente?
R. – No tuve referentes. Escuché a los mayores, procure aprender de quien sabía o ya estaba donde fui. Y actué procurando hacer el cometido de la mejor manera que pudiese o transcurrir sin crear desajustes o desequilibrios.