La Fundación Cajasol ha inaugurado en la Sala Velázquez la exposición ‘Juana Biarnés. A contracorriente’, en la que recupera el trabajo de la que está considerada como la primera fotoperiodista de España, que desarrolló su labor entre mediados de los años sesenta y los primeros ochenta, cuando se retiró, según comentaron los responsables de la muestra, cuando se incrementó el amarillismo en la prensa de los famosos.
De hecho, no hay nada más alejado del estilo, callejero y espontáneo, de esta fotógrafa catalana que los posados pactados y el estudio usado como estrategia publicitaria, como demuestran sus instantáneas a personajes famosos en la intimidad, como la duquesa de Alba junto a sus hijos o una joven Marisol ensayando en la casa de los Goyanes.
Juana Biarnés, que inició su carrera profesional en el diario Pueblo, trabajando posteriormente para ABC y Blanco y Negro, retrató la España de los años sesenta que se abría a la cultura pop, con trabajos destacados para Raphael, de quien fue fotógrafa oficial durante siete años, pero también con imágenes llenas de fuerza a un Julio Iglesias ensayando con su guitarra junto a una fan o a retratando a las admiradoras de Los Bravos con sus pancartas junto a un par de policías con cara de pocos amigos.
La confianza que se ganó de los personajes que retrataba le llevó a tomar fotografías como las que le hizo a Luis Buñuel durante el rodaje de ‘Tristana’, a Orson Welles en el burladero de un coso, a Paul McCartney desperezándose en su suite o a Luis Miguel Dominguín hablando con el torso desnudo y recostado en la cama con Romy Schneider en la habitación de un hotel de Arlés.
Estas imágenes, junto a muchas más, pueden disfrutarse en esta exposición que se inauguró el pasado miércoles en la Fundación Cajasol, con la presencia de su presidente, Antonio Pulido, el comisario de la muestra, Chema Conesa, la representante de Photographic Social Vision -que gestiona el archivo de la fotoperiodista-, Silvia Omedes, y su viudo Jean Michel Bamberguer.
El título hace referencia, como señaló Pulido, al hecho de que Juana Biarnés se tuvo que abrir paso como fotoperiodista en un mundo dominado por hombres, para ofrecer un «retrato fiel de esa sociedad española en blanco y negro que se abría a la modernidad« en los 60.
La exposición estará abierta al público hasta el 19 de mayo, de lunes a sábado, de 11 a 14 horas y de 17 a 20 horas. Domingos y festivos, cerrada. Horario de Feria: de lunes a sábado, de 11 a 14 horas.