“El impacto de la desinformación en las elecciones europeas” La desinformación preocupa a la Comisión Europea por los comicios recientes a los que estaban convocados cuatrocientos millones de personas. ¿Qué herramientas tenemos para combatir la desinformación? ¿A qué retos nos enfrentamos y qué pueden hacer los centros de investigación y agencias de verificación? Estas y otras cuestiones se han abordado en la mesa redonda “El impacto de la desinformación en las elecciones europeas”, celebrada durante las jornadas con las que el observatorio ibérico de medios digitales, Iberifier, coordinado por la Universidad de Navarra, inicia su segunda etapa de investigación. El evento ha contado con la asistencia de la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite. Moderada por Ramón Salaverría, profesor de la Universidad de Navarra e investigador principal de Iberifier, en el foro han participado la decana de la Facultad de Comunicación del centro académico, Charo Sádaba; Ángel Badillo, investigador principal del Real Instituto Elcano; y Sergio Hernández, coordinador de la agencia de verificación EFE Verifica. Los expertos han coincidido en que las 72 horas previas a unas elecciones son críticas y que las estrategias de desinformación persiguen erosionar el funcionamiento de la democracia. “La UE, que tiene en las políticas de defensa una de sus principales prioridades en el momento actual, da especial importancia a estas elecciones y a combatir las estrategias de desinformación. La reciente ley de Servicios Digitales o de la IA son prueba de ello”, ha señalado Sergio Hernández. El coordinador de EFE Verifica ha expuesto distintos escenarios y narrativas de desinformación frente a unas elecciones y ha señalado que las 72 horas previas son críticas. “Se han detectado procedimientos que crean ‘autopistas’ de desinformación a través de canales cuyo consumo van a promover entre la población e iniciar una narrativa para erosionar la democracia, con la búsqueda de menor participación, emisión de votos nulos, etc”. “La decisión de los ciudadanos está condicionada por la información que reciben apenas unos días antes de los comicios. Las noticias falsas que circulan a través de las plataformas pueden modificar la conducta electoral en apenas 48 y 72 horas”, ha añadido a continuación el investigador del Real Instituto Elcano, Ángel Badillo. Badillo ha abordado los desafíos a los que nos enfrentamos y cómo prevenir frente a las herramientas de inteligencia artificial empleadas para generar bulos y noticias falsas: desde un vídeo manipulado, un corte de audio falso o la clonación de la página web de un medio de comunicación. “El ‘si no lo veo no lo creo’ ya no es válido. Si con herramientas creadas con IA no podemos combatir la desinformación generada por IA habrá que verificar los hechos con otros datos y otras fuentes”, ha afirmado. “Con la IA se crea un nuevo mundo en donde lo que se ve no será una prueba suficiente. Los periodistas seguiremos siendo importantes y la alfabetización mediática sigue siendo clave”. En este sentido, Ramón Salaverría ha mencionado que uno de los principales escudos que puede tener la sociedad civil ante la desinformación es precisamente la educación. “En términos de alfabetización, ya poco se puede hacer, dado que las elecciones son en junio. La educación requiere tiempo para la adquisición de competencias, capacidades y habilidades”, ha asegurado la decana de la Faculta de Comunicación, Charo Sádaba. Ha afirmado que ante la desinformación previa a unas elecciones, “la ciudadanía queda en un plano vulnerable. Sobre todo aquellas personas que no tienen decidido su voto” y ha abogado por animar a la ciudadanía a consumir medios de comunicación y fuentes fiables de información. Charo Sádaba ha señalado también la necesidad de “bajar el tono” de las campañas electorales. “La alfabetización mediática tiene que tener lo suyo de pensamiento crítico, de sana distancia frente a lo que estoy escuchando o lo que estoy viendo, pero con cuidado para no generar una desconfinaza total en los medios de comunicación. Es un equilibrio complicado, que requiere mucha mesura y no sé si estamos preparados para afrontar esto ahora como sociedad”, ha concluido. Investigando sobre desinformación desde 2021 El observatorio ibérico de medios digitales Iberifier, creado en 2021 por la Comisión Europea y coordinado por la Universidad de Navarra, ha iniciado con estas jornadas su segunda etapa de investigación. El observatorio, con sede en Pamplona, prolongará hasta 2026 sus actividades de análisis de los fenómenos de desinformación en España y Portugal, gracias a una nueva financiación de 1,27 millones de euros, Iberifier está formado por 25 centros de investigación, universidades y agencias de verificación informativa hispano-lusos. Iberifier se ha centrado hasta ahora en la investigación, análisis y desmentido de bulos, así como en la difusión de buenas prácticas en el consumo crítico de la información por parte de la ciudadanía. En su segunda etapa, hasta 2026, el observatorio extenderá estas actividades al conjunto de los países de lengua española y portuguesa, al tiempo que coordina su trabajo con el resto de los observatorios promovidos por la Comisión Europea en los 27 países de la UE. Enlace a la fuente original
“El impacto de la desinformación en las elecciones europeas” La desinformación preocupa a la Comisión Europea por los comicios recientes a los que estaban convocados cuatrocientos millones de personas. ¿Qué herramientas tenemos para combatir la desinformación? ¿A qué retos nos enfrentamos y qué pueden hacer los centros de investigación y agencias de verificación? Estas y otras cuestiones se han abordado en la mesa redonda “El impacto de la desinformación en las elecciones europeas”, celebrada durante las jornadas con las que el observatorio ibérico de medios digitales, Iberifier, coordinado por la Universidad de Navarra, inicia su segunda etapa de investigación. El evento ha contado con la asistencia de la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite. Moderada por Ramón Salaverría, profesor de la Universidad de Navarra e investigador principal de Iberifier, en el foro han participado la decana de la Facultad de Comunicación del centro académico, Charo Sádaba; Ángel Badillo, investigador principal del Real Instituto Elcano; y Sergio Hernández, coordinador de la agencia de verificación EFE Verifica. Los expertos han coincidido en que las 72 horas previas a unas elecciones son críticas y que las estrategias de desinformación persiguen erosionar el funcionamiento de la democracia. “La UE, que tiene en las políticas de defensa una de sus principales prioridades en el momento actual, da especial importancia a estas elecciones y a combatir las estrategias de desinformación. La reciente ley de Servicios Digitales o de la IA son prueba de ello”, ha señalado Sergio Hernández. El coordinador de EFE Verifica ha expuesto distintos escenarios y narrativas de desinformación frente a unas elecciones y ha señalado que las 72 horas previas son críticas. “Se han detectado procedimientos que crean ‘autopistas’ de desinformación a través de canales cuyo consumo van a promover entre la población e iniciar una narrativa para erosionar la democracia, con la búsqueda de menor participación, emisión de votos nulos, etc”. “La decisión de los ciudadanos está condicionada por la información que reciben apenas unos días antes de los comicios. Las noticias falsas que circulan a través de las plataformas pueden modificar la conducta electoral en apenas 48 y 72 horas”, ha añadido a continuación el investigador del Real Instituto Elcano, Ángel Badillo. Badillo ha abordado los desafíos a los que nos enfrentamos y cómo prevenir frente a las herramientas de inteligencia artificial empleadas para generar bulos y noticias falsas: desde un vídeo manipulado, un corte de audio falso o la clonación de la página web de un medio de comunicación. “El ‘si no lo veo no lo creo’ ya no es válido. Si con herramientas creadas con IA no podemos combatir la desinformación generada por IA habrá que verificar los hechos con otros datos y otras fuentes”, ha afirmado. “Con la IA se crea un nuevo mundo en donde lo que se ve no será una prueba suficiente. Los periodistas seguiremos siendo importantes y la alfabetización mediática sigue siendo clave”. En este sentido, Ramón Salaverría ha mencionado que uno de los principales escudos que puede tener la sociedad civil ante la desinformación es precisamente la educación. “En términos de alfabetización, ya poco se puede hacer, dado que las elecciones son en junio. La educación requiere tiempo para la adquisición de competencias, capacidades y habilidades”, ha asegurado la decana de la Faculta de Comunicación, Charo Sádaba. Ha afirmado que ante la desinformación previa a unas elecciones, “la ciudadanía queda en un plano vulnerable. Sobre todo aquellas personas que no tienen decidido su voto” y ha abogado por animar a la ciudadanía a consumir medios de comunicación y fuentes fiables de información. Charo Sádaba ha señalado también la necesidad de “bajar el tono” de las campañas electorales. “La alfabetización mediática tiene que tener lo suyo de pensamiento crítico, de sana distancia frente a lo que estoy escuchando o lo que estoy viendo, pero con cuidado para no generar una desconfinaza total en los medios de comunicación. Es un equilibrio complicado, que requiere mucha mesura y no sé si estamos preparados para afrontar esto ahora como sociedad”, ha concluido. Investigando sobre desinformación desde 2021 El observatorio ibérico de medios digitales Iberifier, creado en 2021 por la Comisión Europea y coordinado por la Universidad de Navarra, ha iniciado con estas jornadas su segunda etapa de investigación. El observatorio, con sede en Pamplona, prolongará hasta 2026 sus actividades de análisis de los fenómenos de desinformación en España y Portugal, gracias a una nueva financiación de 1,27 millones de euros, Iberifier está formado por 25 centros de investigación, universidades y agencias de verificación informativa hispano-lusos. Iberifier se ha centrado hasta ahora en la investigación, análisis y desmentido de bulos, así como en la difusión de buenas prácticas en el consumo crítico de la información por parte de la ciudadanía. En su segunda etapa, hasta 2026, el observatorio extenderá estas actividades al conjunto de los países de lengua española y portuguesa, al tiempo que coordina su trabajo con el resto de los observatorios promovidos por la Comisión Europea en los 27 países de la UE. Enlace a la fuente original